En general soy refractario a celebrar las fechas arbitrariamente designadas a base de imposiciones publicitarias y con evidentes intenciones mercantilistas. No celebro el día de la madre, ni del padre, ni del maestro, ni del compadre…ni siquiera el día del amor.
Pienso que todos los días deberían ser el de la madre, del amor, del padre, etc. Y en todo caso celebro el día del padre en la fecha en que me inauguré de padre, que es cuando nacieron mis hijos, y el de la madre en mi cumpleaños, cuando mi progenitora se inauguró de madre…en fin. Una más de las sinrazones que la edad nos vende como verdades absolutas.
Sin embargo no puedo abstraerme de estas celebraciones y no por mi gusto, es que hay personas que esperan y desean ser felicitadas en estas fechas y yo cedo con mucho gusto ya que en realidad no cuesta nada hacerse presente sin que ello signifique renunciar a mis opiniones.
Así que deseo que en este día (y todos los demás) las madres reciban el cariño y la devoción de sus hijos, que las cuiden y vean por ellas siempre. Los que tenemos la inmensa fortuna de tenerlas aún con nosotros no desaprovechemos la oportunidad de decirles o hacerles sentir que las amamos y que estamos agradecidos con ellas por haber sacrificado muchas cosas de su vida para entregársenos enteras, sin dudas y sin límites.
!Que a toda madre son las madres!
Hay un viejo poema de la autoría de Guillermo Aguirre Fierro: “El brindis del bohemio”, seguramente la mayoría de ustedes lo conocen. El gran Manuel Bernal, el llamado declamador de América, conocido también por su personaje del Tío Polito de los años cincuentas del siglo pasado, lo popularizó e incluso realizó algunas grabaciones con este y otros poemas inolvidables.
Me tomé la libertad de hacer un recorte del poema con objeto de destacar solamente la parte que hace referencia a las madres. Es triste, lacrimógeno, hasta cursi, pero muy bien escrito y extraordinariamente bien dicho por Don Manuel…
Premio al que no se le escurra alguna lagrimita.
Disfrútenlo
Ramón
PD. Si alguien quiere escuchar el poema completo AQUÍ